jueves, 24 de julio de 2008

BEATRICE WOOD


CERAMICA FINA, ALGUNOS PRECIOS RAZONABLES Y OTROS, EXCESIVOS.


Este era el texto que esta magnífica ceramista estadounidense, nacida en 1893 en San Francisco, colocó en la entrada de su taller en Ojai (California).


Integraba el grupo NEW YORK DADA junto con Henri-Pierre Roché y Marcel Duchamp (su gran amor). Funda junto a ellos la revista THE BLINDMAN, en 1917.


En 1933 se inicia en la cerámica. Sus obras se caracterizan por el lustre que aplica, que les confiere colores brillantes e iridiscentes, convirtiéndolas en verdaderas joyas.


Viaja a Europa, Japón y varias veces a India, en donde es influenciada por su cultura y su filosofía. En la década del 50 instala su taller en Ojai, donde luego se desarrollaría la comunidad hippie en los 60. Entre sus amigos figura Jiddu Krishnamurti, quien también fue su guia espiritual. Por su aporte al movimiento artístico de su generación, fue considerada LA MADRE DEL DADA.


Beatrice siguió trabajando hasta el fin de sus días. Sus obras se exhiben en su taller y museos como el Metropolitano de New York y el Smithsoniano de Washington.


El 12 de marzo de 1998 falleció pocos días después de haber cumplido 105 años.




«La cerámica para mí no es como perseguir la gloria, es más bien como una disciplina diaria, una búsqueda puntual. En la India se llamaría mi «dharma». La vida es dual, hay materia y espíritu, y uno no puede funcionar completamente sin el otro. Para la creatividad, la parte espiritual; para trabajar, la matérica, que debe ser lo suficientemente fuerte para dar cabida a lo espiritual. Si la forma tiene rajaduras, el espíritu se escapa», solía decir Beatrice.




Fuentes:
Revista Cerámica (España) Nº 90 - Infocerámica: Cerámica y ceramistas
La Madre del Dada (obituario) - Cristopher Reed
Foto: www.beatricewood.com


1 comentario:

n.g.i. dijo...

me parece genial el comienzo de tu trabajo pero lo qu emas me gusta com o cambio con los años. Como un buen vino maduro lentamente.